Imagínote juzgándome pintoresco
oh, tú, grave, aún más que denso
imagínote asesorando en la plenipotencia de tu severidad
Ya ves cuáles, para mí, tus atributos:
grave, denso, severo
Imagínote sólo validando
la concepción adusta
Se me imponen mis pareceres
en base a antiguas sospechas:
por cómo me evitas o saludas
por el arraigo de tu distancia
esa acrimonia
empecinada
No abundaré:
desecharé la tentación:
inhibo la sorna
reprimo la causticidad
me abstengo del sarcasmo
suspendo la socarronería
ni un chiste intelectualoide destilaré
fuera la transversalidad y su desenfado
Mi rencor hoy es grave, denso
básicamente severo, adusto
inserto en la acrimonia
y sin embargo, pintoresco.
Rolando Revagliatti
www.revagliatti.com
¡Haz clic en una estrella para puntuar!
Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0
Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.
Responses