ayer asesiné al hombre que me mató.
no lo hice de a poco como él.
lo mío fue contundente
lo hice en defensa propia.
soy asesina confesa y estoy prófuga.
asesina una vez más.
antes fui cómplice de mi propio asesinato.
mientras escribo,
cada palabra es una astilla
que se me clava en el cuerpo.
antes, escribir era lo único
que le insuflaba vida a mi muerte
ahora que maté a mi asesino
mis manos se quebraron
ya no sé escribir. o sí.
Instagram: @corazondtango
¡Haz clic en una estrella para puntuar!
Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0
Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.
Responses
Es una crónica de la época. Vibrante y dolorosa. Bellísima.